6-4-2021 CALLEJON DE SAN PEDRO Y SU LEYENDA TITULADA EL "DIABLO CONFESOR"
Afotando y documentando Toledo. 6-4-2021. Callejón de San Pedro y su leyenda. Llamada el Diablo Confesor…
Como siempre os recomiendo ver mi blog, para poder ver más fotos de este precioso y coqueto callejón toledano, pinchad en las letras azules y os saldrá solo: https://joseherfer.blogspot.com/
Os decía al principio que esta leyenda se llama: La leyenda del Diablo Confesor y es que el Diablo no sólo forma parte del callejero Toledano como ya os mostré con su calle….https://joseherfer.blogspot.com/
También la catedral aloja entre sus góticos muros una de las leyendas más “infernales” de la ciudad; un tema recurrente en las leyendas toledanas que ahora es un placer mostraros aunque SOLO sea de FOTOS….
Cuenta la leyenda del Diablo Confesor que en este Callejón de San Pedro vivía un noble toledano llamado Don Ángel de Arellano…
Sin embargo, su hijo Gonzalo era un “pieza”, Gonzalo tenía muy mala fama, siendo soberbio, prepotente y mala persona.
En todas las peleas que hubiera en Toledo siempre estaba de por medio Gonzalo, estaba metido en apuestas que debía pagar su padre siempre, y muchas jóvenes toledanas vieron manchado su honor ante los hechos de Gonzalo,
Ángel Arellano le tapaba todo lo que podía….
El padre estaba muy harto de las andanzas de su hijo, cuando de repente Gonzalo se enamoró de una bella toledana llamada Sagrario, que era hija de un pobre pescador del rio Tajo…
Sagrario sedujo el duro corazón del joven Gonzalo. La sencillez de Sagrario no sólo ablandó el corazón de Gonzalo, sino que también provocó un cambio radical en la personalidad del joven, hasta el punto de convertirse en poco tiempo en uno de los hombres más pacíficos y honrados de la ciudad. Los conocidos y el propio padre no daban crédito al cambio, tan sólo explicable por la intervención divina o de algún santo que hubiera intercedido por él.
Pero no todo era tan bonito…
Cosas de antes, y viajad en el tiempo….
Don Ángel no autorizaba la boda y esto provocó que las discusiones con su hijo fueran tremendas, oyéndose gritos y voces en mitad de la noche, llegando a oírse a veces desenvainar las espadas….
En una de estas discusiones, y antes de que la cosa fuera a más, el padre, Don Ángel, salió de esta calle de San Pedro, hacia la Catedral (recordad que está casi enfrente), buscando consuelo y para confesar sus pecados, pero al entrar en la Catedral vió mucha gente esperando para confesar… esto le desesperó porque llevaba prisa… así que decidió salir de nuevo…
Pero al salir vió un confesionario cerca de la Puerta del Perdón de la Catedral… y no había gente, con lo cual decidió acercarse, arrodillarse y comenzar el relato de los hechos que hasta allí le habían llevado.
Algunos que le vieron salir se acercaron también al confesionario, pero se dieron la vuelta al no ver a ningún sacerdote, y pensaron que Don Ángel se había vuelto loco de remate…
Minutos más tarde se oyó un grito por todo el callejón de San Pedro, si, el de la foto… ya que se vio como Gonzalo de Arellano apareció con una cuchillada en la espalda, y manando sangre a tope. Otro grito salió de entre los que descubrieron el cadáver ya que se dio cuenta que la daga que aún se mantenía en la espalda de Gonzalo era propiedad de su padre… Don Ángel…
“Conté al sacerdote de la Catedral, que Gonzalo pretendía a una joven hija de un pescador, y esto nos había llevado a caer en el insulto y a punto había estado de provocar un daño mayor si no hubiese salido de casa camino de la confesión. La voz que había en el confesionario, profunda, convincente, me avisó de las pocas posibilidades de recuperar a mi hijo, y que éste caería para siempre en desgracia al casar con esa mujer como esta. La muerte era la única solución, ya que a grandes males grandes remedios y es preferible antes de la deshonra…
La voz del confesionario me convenció que el enorme sacrificio no suponía problema alguno, sino más bien un alivio para mi corazón, y aún a sabiendas de lo duro de la decisión, seguí el consejo dado por el sacerdote y partí de la Catedral hacia el fatal destino para mi hijo, buscando la salvación de su alma”.
Y le clavé mi daga en la espalda. Y hasta ahora. Me entrego a la justicia….
Esta es su confesión… y podría ser una confesión más, pero lo curioso de esta leyenda es que nadie en la Catedral pudo confirmar que hubiera sacerdote alguno en aquel confesionario tan viejo al lado de la Puerta del Perdón…
Poco después, en Toledo corrió la noticia de que el mismo Satanás, vestido de cura, había tomado confesión y convencido a Don Ángel de Arellano para asesinar a su hijo, buscando acabar con su bondad y el nuevo amor que había surgido, y de paso condenando el alma del padre para toda la eternidad.
La Catedral de inmediato quitó el confesionario en el que supuestamente había tomado confesión el Diablo, y muchos toledanos tardaron en volver a la Catedral a confesar sus pecados…
Y hasta aquí esta leyenda menos conocida en Toledo. Espero que os gusten las fotos que es de lo que se trata. Y veremos si tras esto sigo contando leyendas….
Recordad que daré a me encanta al leeros…. Los días que no pueda contestar… y que SOLO ESPERO QUE OS GUSTEN LAS FOTOS.
Y como siempre os recuerdo que se pueden ver estas cosas y otras más en mi blog, veréis más fotos de esta encantadora calle, así como la famosa Puerta del Perdón de la Catedral de Toledo… os lo recomiendo; os dejo la dirección para que pinchéis y os salga solo:
https://joseherfer.blogspot.com/
Feliz día.
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